viernes, agosto 17, 2007

Kantareller

Durante el verano en Suecia hay muchas costumbres por llamarlas de alguna manera. A veces pienso que son parte misma de la mayoría de los suecos, cosas que han hecho toda su vida por generaciones y que dificilmente cambian y se van transmitiendo de generación en generación.

Una de ellas es la de recolectar lo que la naturaleza les da, y que es por montones debida a la extensa cantidad de bosques que hay por acá.

Entre las muchas cosas que se pueden encontrar y comer del bosque son: las moras como las blueberry, las fresas silvestres, las frambuesas, etc y tambien una extensa variedad de setas, hongos o champiñones como les quieran llamar.

En esta ocasion recogimos hongos que se llaman Kantareller, son casi casi el "oro" de Suecia pues aunque hay muchos no es tan facil encontrarlos, tiene uno que caminar un buen pero sobre todo encontrar el lugar adecuado. Es chistoso porque si ves a alguien que trae porque encontró o en alguna platica sale que alguien recolectó muchos y preguntas: donde los encontraste? .. nadie te dice, es como un secreto porque no quieren decir tu lugar magico porque luego vas y los recoges jeje.
Desde el primer verano que pasé aqui hemos ido al bosque a recogerlos, he de decir que he aprendido a disfrutarlo porque ademas son riquisimos. Le he tomado el gusto a esta actividad, que yo como chava de ciudad pues como que no se me daba mucho. Son cosas tan distintas a lo que uno hace en una ciudad como la que yo vengo y sobre todo que yo no crecí con bosques ni lagos cerca de mi y por lo tanto ese amor a la naturaleza que los suecos tienen pues no es nato :)

Entre otras cosas, parte del "encanto" de ir a recoger cositas al bosque es el encuentro con todo tipo de animalejo que no me gusta tanto y que pican y duelen. Por eso debe de ir uno bien tapadito y botas para poder meterte por todos lados.

Y aprende uno poco a poco a diferenciarlos, encontrarlos y saber donde es el lugar apropiado. La verdad es impresionante la cantidad de diferentes clases que crecen en el bosque. Es todo tan lindo y diferente a lo de una ciudad.

Asi crecen en el bosque!


En fin, que éste verano hemos ido varias veces y siempre hemos regresado con una canasta llena de ellos. Tenemos unas canastas y unos cuchillos especiales que tienen una especie de cepillo de un lado, esto facilita mas la limpieza. Normalmente los vamos limpiando al recogerlos y antes de ponerlos en la canasta, asi nos evitamos llevar bichos indeseables a la casa jeje y es mas rapido al momento de cocinarlos.

Lo mas sencillo es freirlos en mantequilla y luego comértelos en una rebanada de pan. Pero hemos hecho comidas mas complicadas y con ellos haciendo una especie de salsa para la carne, hay muchisimas recetas para disfrutarlos. Otros los deshidratamos para despues usarlos en salsas o bien se pueden congelar y utilizar cuando ya no se temporada.

Asi de grandes encontramos algunos!




En algunas tiendas los venden, pero eso si carísimos!! a precio de oro!! Por cierto, son amarillos, por eso es que tambien les dicen que son como oro!

En la mesa de la cocina ya limpios!

Besitos por montón. Conny


14 comentarios:

Nancy dijo...

Conny me encanta leer estas cosas, son tan diferentes a lo que hacemos por acá , aunque dejame decirte que esto me recordó la pizca de chile piquín que hacen mi papá y mi hermano en el rancho, bueno en cada lugar se dan sus cosas, acá es un ambiente desértico, a mi me gustan mucho los champiñones, pero es verdad que cda especie tiene su sabor partícular, estos te han de quedar ricos.

Te mando un saludo.

Nancy

Nata dijo...

MMMMMM se me antoja, quierooooooooooooooo. De ahora en mas cada vez que salga a caminar voy a prestar mas atencion a las cosas que tengo alrededor.

maga dijo...

Ayy Conny que suerte tienes de tener bosque tan cerca, es que mira igual y somos de la city pero cuando aprendemos las maravillas que nos da la naturaleza, y ademas gratis dan ganas de ir a cada rato a buscar, no?
Asi nos paso con las fresas silvestres , la luna casi se da una empachada, jajaja

bueno , los cantarel son muy ricos

Norma dijo...

Es verdad, cuando uno llega a un pais que no es el tuyo te das cuenta de lo diferente que son sus costumbres y al principio te causa gracia y asombro pero luego le ves la razón.

Cuando llegué a España me sorprendió (era invierno) que en las salas de las casas tenían, en lugar de mesitas bajitas, unas mesas altas grandotas y con manteles pesados, eran tan altas que me llegaban a la cintura! y en medio de los sofás se me hacía extraño.

Se llaman "mesas camillas" y el secreto está en que debajo tienen un calentador especial, tu llegas te sientas en el sofá, levantas el mantel y metes las piernas debajo de la mesa......calientito!!!!!

Las mesas camillas son altas porque la gente suele comer en la sala para no tener frío, ya sabes si los pies se te calientan tu cuerpo deja de estar helado :D

Qué gracioso no? pues ahora soy partidaria de tener mesotas en la sala jajajajajaja

Un saludo desde Sevilla!

Anónimo dijo...

es medio triste que en mex con tanto espacio y tanta naturaleza por todos lados, no exista la cultura "citadina" del culto por la naturaleza.
la verdad que yo estoy bien orgullosa de haber crecido en un rancho y de saber como se hacen las tortillas desde cero, de saber por qué debajo del maiz se siembran también calabazas y frijoles, de guardar los huevos frescos en ollas con manteca para que duren mucho, de por qué los nopales se cortan en la mañana tempranito cuando todavía están húmedos y las espinas no vuelan...
en mex también hay costumbres campiranas muy bonitas, y que como se ve, pocos conocemos. vergüenza!. menos mal te procuraste un encuentro con la naturaleza, aunque no fuera tu país paisa...

Anónimo dijo...

Y, cómo los prepararon. Ah, cuando hablasté de setas recordé a una señora del tianguis que hace unas gorditas que ush, ya ando babiando, con salsa verde, cebolla y cilantro.
Así como tus taquitos al pastor.
By the way, ayer cociné albondigas con salsa verde. Yommie.
Ró.

Elena dijo...

Yo nunca he ido al bosque a recoger rebozuelos pero me encantan uhmmmmm bueno toda la variedad de hongos (menos los alucinogénos... jajaja)
Son mis favoritos, y además son muy caros no? y hay que saber de cuales si y de cuales no... oye pues ya que estamos en estas danos una recetita rica, te late?

0o_irene_o0 dijo...

aqui tambièn hay esos hongos! se llaman "galletti" y se hacen igual con la mantequilla o con arroz (risotto) y son de-li-cio-sos!!!

yo tambièn crecì y vivì en la ciudad (D.F.) por 18 años asi es que cero vida campestre, aqui en cambio aprendì muchìsimas cosas a cerca de las plantas, los animales, el paisaje (estudio arquitectura del paisaje y la gente aqui tiene una relaciòn muy estrecha con la provincia...)

Diana por una parte tiene razòn; yo lamento mucho el hecho de conocer poco estos aspectos de mi paìs de origen...por otro lado me pregunto si hubiera crecido en una ciudad còmo hubiera sido su mentalidad...es claro que estando en provincia tus sentimientos son màs arraigados que estando en una ciudad caòtica e impersonal...

saludotes!!

Rohini dijo...

Que ricos...se antojan muchisimo.y que rico caminar para encontrarlos,es lo bueno de vivir en un lugar cerca del bosque.
Saludos
Estefani

Patricia dijo...

Los viajes ilustran y cuando uno no puede viajar al menos los blogs asi que gracias por compartir lo que vives por alla!!

saludos

Angelica Jensen dijo...

Uy si Conny aqui tb venden, pero yo voy al bosque y no veo nada.
será que estoy mas al sur y se las han llevado?jajaja

Maru dijo...

Me hiciste acordar de cuando yo era niña y vivía en el sur de Chile. Tambièn había bosques e íbamos a recoger setas (callampas en buen chileno). Ahora, no sé cómo se distinguen las venenosas con las comestibles, pero ya ves, sobreviví hasta ahora.
besotes

Elena dijo...

Conny!!!
Mil gracias por los chiles y la pulserita... ahora si ya no tengo pretexto para no ponerme las pilas con los taquitos al pastor.
Gracias once again.

Celiux dijo...

conny, pues devolvièndote la visita...por aquì andarè viendo lo que comentas de tu vida allà tan lejos de Mexiquito!!!